¡Dos cosas que Dios quiere decirte antes de empezar el 2019!

Cada vez que empieza un año nuevo, ocurre en mí como una explosión de felicidad, la verdad es que a mí me gustan los cambios, aunque sé que a mucha gente les asusta, creo que es porque siempre tengo esa expectativa de, "algo nuevo", "algo mejor", no quiero decir que el 2018 fue malo, pero cada fin de año sueño con menos y menos y cada vez menos sinsabores, sin embargo, la palabra de Dios siempre presente en mi interior me dice 365 veces: ¡No temas![1]

Estos días me he detenido a pensar, en que no puedo iniciar un año nuevo con la misma mentalidad del año anterior, entonces vino a mi mente dos palabras que vuelven a levantar mi mirada hacia el cielo y que drenan todos esos pensamientos de insipidez, monotonía y frialdad para con las cosas de Dios.

Es normal que en nuestra vida como hijos e hijas de Dios, pasemos por esos momentos de cansancio espiritual, y es allí, en ese estado de vulnerabilidad que nos debilitamos a tal punto que, ya no queremos orar, no queremos visitar a nuestros hermanos y nos enojamos fácilmente. Nos enfriamos. Sí, he pasado por eso. Sé que ha sido el Espíritu de Dios trayendo a mi memoria su consuelo y trayendo a mi mente sus palabras de aliento y de templanza, que me reaniman a levantarme y no dejar que se minimize su llama en mí.

Y, volviendo a esas dos palabras que Dios ha traído a mi mente, te contaré cuáles son:

La primera es, "arrepentimiento", uno puede llegar a pensar que arrepentirse es cosa de una sola vez, pero no, Dios celebra nuestro continuo arrepentimiento hasta que aquello en lo que fallas siempre, sea cada vez menos, menos y menos. Así que, yo quiero iniciar el año 2019, con arrepentimiento, no me refiero a renegar del año 2018, sino, a hacer memoria de todas aquellas cosas en las que fallaste, y aquí es donde viene la segunda palabra que vino a mi mente, "pecado", pero antes de entrar en esta segunda palabra, déjame explicarte lo que significa "arrepentimiento". 

La palabra griega para ARREPENTIMIENTO es METANOIA que se compone de dos partes:

Sin duda alguna, arrepentirse va más allá de lamentarse por algo, es un cambio de mente, una metamorfosis. Mi mejor definición para esta palabra es: un cambio de mente que te lleva de regreso a Dios. ¡Regresa a Dios hoy!, cambia tu manera de pensar, antes de empezar un año nuevo, vuelve tu mirada a él, hoy es el día para volver tus ojos a él, no importa cómo estés, ni lo que hayas hecho, mira hacia mí, dice el Señor.

Por tanto, para que sean borrados sus pecados, arrepiéntanse y vuélvanse a Dios, a fin de que vengan tiempos de descanso de parte del Señor. Hechos 3:19 

La Biblia también dice en Juan 15:5: Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada. Y esta es la verdad, fuera de él, no hay nada, no podemos hacer nada, y todo es mejor cuando estamos unidos a él, permaneciendo, enfrentando la vida con una esperanza inconmovible.

Mira hoy a Dios, y cuando el reloj marque las 12 y se haga el 1 de Enero del 2019, mira a Dios, no mires atrás, y regresa a él. ¡Arrepentíos y convertíos!. Puede que ya seas hijo e hija de Dios, sin embargo, puedes hacer lo mismo, puedes ser mejor que ayer.

Entremos en la segunda palabra, "pecado", en los idiomas originales de la Biblia, las palabras que se traducen como "pecado" significan fallar el tiro, o no alcanzar el objetivo.

Como Dios es el Creador, tiene el derecho de establecer normas para la humanidad ([Apocalipsis] 4:11). Y nosotros debemos rendirle cuentas por nuestros actos (Romanos 14:12). Sin embargo, aún sabiendo esto, fallamos al tiro, una y otra vez.

Lo sé, sé que fallaste al tiro este año 2018, y puede que hayas llorado creyendo que no hay perdón, o que Dios es irreal para ti o que no te oye. Está bien, fallaste, yo fallé, todos fallamos. Pero hoy tienes una nueva oportunidad, "nuevas son sus misericordias cada mañana", dice Dios (Lamentaciones 3:23). ¡Son nuevas!, esa es mi esperanza, no para seguir fallando al tiro, sino para arrepentirme, volver a él, mirar de nuevo a él y en su poder, lograr ser mejor y hacer y pensar mejores cosas.

¡Este nuevo año 2019, no falles al tiro!, podemos lograrlo en su fuerza. Y si fallas una vez más, mira a él, vuelve a él, y levántate.

Antes de empezar este 2019, digámosle a Dios: "Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí."(Salmo 51).

Mi oración por ti:

Por esta razón me arrodillo delante del Padre, de quien recibe nombre toda familia en el cielo y en la tierra. Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios.

Al que puede hacer muchísimo más que todo lo que podamos imaginarnos o pedir, por el poder que obra eficazmente en nosotros, ¡a él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones, por los siglos de los siglos! (Efesios 3:14-21)

Amén.

¡Que tengas un feliz año nuevo, lleno de la plenitud de Dios!

Por: Magdielys Leira

[1] Aleteia. 07/09/2017. Recuperado de: https://www.elpandelospobres.com/noticias/no-temas-uno-de-los-consejos-mas-repetidos-en-la-biblia